MICHEL HAZANAVICIUS

Director

Entrevista de Javier Díaz Box

Recibido el 21 de Marzo de 2012
Aceptado el 27 de Marzo de 2012

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A este descendiente de judíos lituanos, nacido el 29 de marzo de 1967 en París (Francia), con una filmografía de lo más corta a la par que ecléctica. Debutando en 1999 con Mes Amis y alcanzando un éxito enorme con la comedia OSS 117: El Cairo, nido de espías (2006); a su vez viene a ser un remake retomando el personaje de Hubert Bonisseur de la película OSS-117 que dirigiera André Hunebelle en 1963 como imitación de la serie Bond, que tuvo como primera consecuencia inmediata una secuela OSS 117: perdido en Río (2009), en ambas una vez mas no acompañó el éxito en taquilla con el sector crítico. Algo que daría totalmente la vuelta con la sorpresa del año The Artist. Entre sus logros figura el de haber sido la primera película muda en ganar el Oscar a mejor film desde Alas (1927), la primera en blanco y negro desde La Lista de Schindler (1993). Y un sinfín de galardones por festivales de todo el mundo.

En su presentación en Madrid (todavía no se sabían ni siquiera los nominados a los citados premios) por lo que reproducimos la rueda de prensa en su totalidad tal y como la vivimos.

- La película está llena de simbolismo. ¿Por qué se llama “El Artista”?

Es el productor quien eligió ese título, el mío era “El lunar”, que era el más apto por esa complicidad que se establece entre los protagonistas.
Y me dejé convencer cuando todo el mundo prefería y veía más idóneo el que propuso el productor; y me recordaba a la manera en la que se presentaba los personajes en el cine mudo, ahora la dama, ahora el policía, el sastre, etc… como un desfile de los personajes que iban apareciendo.

- ¿Tiene en mente los Oscar?

Está en mi cabeza porque me hablan constantemente de ello. Para mi es un enorme placer y me siento completamente afortunado al poder participar en un acontecimiento como los oscar. Bueno!! Si me llegan a nominar… porque todavía no hay nada.
Y no se si realmente tenemos posibilidades de ganar o no, pero creo que es lo de menos; es un acontecimiento tal que ahí no hay posibilidad de perder; el hecho de poder estar ya es un premio.
Estar en la carrera ya es una manera segura de colocar la película en temas de distribución y difusión que es enorme. Además si llega… pues para una película europea es fantástico. Además creo que ayuda el formato.

- Como una persona tan joven como usted se atreve a homenajear al cine retomando películas como Cantando bajo la lluvia; Ha nacido una estrella…

Como espectador las películas mudas que he podido ver, permiten contar las historias de una manera realmente extraordinaria. Es bastante complejo el mecanismo de componer, de hacer una película muda. El hecho de que no haya diálogo, deja un espacio, un margen de participación por parte del espectador que es extraordinario. El hecho de que esté obligado a recrear muchas cosas a partir de su imaginación… le implica de una manera especial y profunda.
El espectador asimila de manera más fácil contar esta historia si se hace dentro de una película muda. A partir de ahí empiezo a contar la historia en Hollywood, con happy-ending, con estrellas… y parte del homenaje al cine viene de ahí. No estaba pensado desde el principio.

- ¿Tenía pensado el plantel de actores desde el principio?

Los dos protagonistas si. Jean Dujardin y Berenice Bejo ya formaban parte del proyecto. Con Dujardin era el tercer trabajo que hacía y Berenice, una excelente actriz, además es mi mujer, lo cual facilita mucho el trabajo. Los personajes los escribí pensando en ellos. A los americanos los elegí in situ, cuando ya estábamos en Estados Unidos.

- Después de seis o siete años de preparación cual es la reflexión que se lleva, lo que ha aprendido. ¿Se ha quedado con más ganas de cine mudo?

Lo que he aprendido es que colocando un perro al lado de un personaje, éste parece más simpático. Eso para empezar (risas).
Lo fundamental es que cuanto menos mejor, para el espectador. Y me encantaría hacer otra peli muda, porque me parece un formato maravilloso, extraordinario, portentoso. Pero para hacerlo tengo que encontrar realmente ganas, no hacerlo por hacerlo.

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- Al hacer una película muda el peso realmente cae en los actores, en la música como hilo conductor. ¿Cómo fue su trabajo con el compositor?

Para mí lo realmente difícil fue la escritura del guión, no tanto el trabajo con los actores, que ha sido lo más natural y lo más fácil. Donde la técnica realmente cambia es a nivel de la escritura, pero claro la música tiene un lugar esencial en todo el proceso.
Entonces desde el principio escuchaba las grandes bandas de las grandes películas de Hollywood, y le obligaba a escuchar eso para que fuese entrando en materia, se sumergiera en esa música sinfónica. Y mientras rodaba en el plató hacia escuchar mucha música a los actores para que se creara una atmósfera adecuada. No era únicamente dramática, también puntos de inflexión importantes… daba ese material al compositor para que entendiese el tono de la secuencia. Pero no se podía hacer una música por secuencia. Dividí la película en bloques, diez o doce bloques yo decía que puntos importantes yo quería que la música siguiera. Porque es como un espejo del guion, la línea emocional de la historia y de los personajes. Entonces como yo contaba esa historia, era necesario que todos se adaptasen a la manera que yo quería que se contase.
Para el músico ha sido un trabajo realmente enorme. Porque yo quería y él tenia que respetar las referencias que le daba, respetar la estructura que yo le marcaba y al mismo tiempo sacar de ahí su propia sensibilidad artística para darle todo lo anterior. Así que ha sido un trabajo realmente complicado e importante y en plazos de tiempo muy cortos porque teníamos que presentarla en Cannes. Y tuvo que hacerlo muy rápidamente.

- ¿Cómo se consigue que te produzcan un proyecto como este que parece desde un principio algo suicida?

Bueno, seis o siete años de preparación no; 10 o 12 años de ganas por hacerla si, pero al final cuando uno decide emprender realizar un proyecto son dos o tres años la preparación final. La suerte que he tenido es que gracias al éxito de OSS 117, los productores ya no te escuchan de la misma manera.
Y aun así hay dificultades porque no era tanto de convencer a unas u otras personas, porque no se pueden hacer películas en contra de algunas personas, es todo un conjunto,  de productores, de actores…

- ¿Te diste cuenta de que tenías una película redonda?

 eeee.. (risas) eeeehhh…… si (risas) Nunca se sabe, siempre tenemos esa fragilidad ante el producto nuestro. Mientras se trabaja es un objeto que tiene vida y cuando se termina es una cosa muerta, ya no tienes manos sobre ese producto.
Lo que mas me gusta es que me feliciten directores veteranos, de mucho renombre que se me han acercado en los distintos festivales que realmente me han alagado mucho, además muchos me han confesado sentir celos, envidia de la película que he hecho, eso es lo mejor que se me puede decir.

- Viendo su filmografía ha revisitado el cine de espías, tipo años 60, el de los primigenios James Bond…ahora el cine mudo. ¿Cualquier tipo pasado fue mejor? ¿Se ha hecho mirar esa obsesión por el pasado?

(risas) no, no... Tengo cuatro hijos, entonces hay que tener los pies muy en el suelo. Pensar en el presente y confiar en el futuro. Hablando del pasado, sí, mis filmes están situados en el pasado, pero obedecen a motivos distintos, si has visto OSS 117 que es un personaje misógino, homófobo, racista, antisemita... Claro colocándolo en los años 50 si se permite pero de otra manera seria inviable. The Artist, como he dicho antes, la mejor manera de que el espectador se identifique con el tema del cine mudo es colocar a este personaje en un contexto de creación de cine mudo, precisamente por ese motivo, pero los ambiento en el pasado como ves por motivos completamente distintos y muy variados.. pero si crees que debo… mirármelo… lo haré! (risas)

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ISSN 1988-8848